jueves, 5 de mayo de 2011

El destino que tu mismo cambiaste

Pienso que tu y yo, hubiéramos sido algo así, dos cuerpos que se repelen y atraen al mismo tiempo.
Un magnetismo que siempre nos hace regresar y acabar fundidos, el uno con el otro.
Hubiéramos sido una pareja de amor real, con sus peleas típicas y algunas importantes, pero nuestro
destino era estar los dos, los dos juntos y juntos, lo cambiamos. Hicimos que ese escrito en el libro
sagrado cambiara su camino radicalmente y aunque nos diera muchas oportunidades para hacernos
ver la decisión y el recorrido correcto, nosotros no las vimos, o quizá solo yo, no lo vi.
Decidimos sobre nuestra vida y así ha acabado..
Tú a miles de kilómetros de aquí, de mi lado, y yo aún sintiendo a mi alrededor tu aroma, tu fragancia
que en poco tiempo se esparcirá para no quedar nada de ella y de tu recuerdo.
Solo imágenes que se confunden entre la imaginación, los sueños y la realidad.

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